2023: un año del enfriamiento de la industria gasintensiva

Verónica Rivière, presidenta GasINDUSTRIAL

 

Hace un año, en este boletín, alertábamos sobre la evidente caída de la demanda industrial. Entonces, en nuestra función de defensa de los intereses de los industriales gasintensivos, solicitábamos al Gobierno medidas urgentes alineadas con las aplicadas a toda nuestra competencia europea. Se trataba de no quedarnos atrás, de no perder ni un ápice más de competitividad, por lo que pedíamos que se diera prioridad a la industria en la agenda política de España.

Este año, a pesar de los precios más bajos —que no más competitivos—, el panorama no ha mejorado y las industrias continúan sin recuperar niveles habituales de demanda de gas. Es cierto que la vertiginosa caída se ha detenido, solo eso. Del 35% de descenso de enero, tras las consabidas paradas navideñas, que se alargaron más de lo habitual, en febrero la caída se fue estabilizando en torno al 20% por debajo de lo que venía siendo un consumo medio normal. En octubre y noviembre la industria gasintensiva ha caído más todavía, hasta situarse en un 25% menos que un año antes. Esta situación es generalizada y afecta a todos los sectores de actividad gasintensivos sin que ninguno logre recuperar sus valores prepandemia.

Jugar con las mismas reglas que la competencia europea

Este panorama refleja la evidencia de las dificultades que atraviesa la industria gasintensiva en España. Estamos viendo cómo se produce una deslocalización de la producción, la falta de competitividad desplaza la producción nacional, aumentan de las importaciones y se reducen pedidos aquí que van hacia países con costes energéticos más competitivos. En resumen, hay un enfriamiento real de la economía y lo más preocupante es que España está a la cola de los impulsos a las industrias nacionales mientras que en el resto de Europa los industriales, nuestros homólogos y competidores directos, reciben más ayudas, de mayor importe y con mucha más celeridad que en el nuestro. 

 

Medidas efectivas y a tiempo

Desde GasINDUSTRIAL hemos solicitado medidas fundamentales para nuestras industrias que, con más demora de la deseada, han ido dando sus frutos. Hablamos de flexibilidad en la contratación de la Qd, reducción de los peajes de gas y otras medidas del Marco de Ucrania. Sin embargo, estos apoyos son insuficientes, se retrasan incomprensiblemente y no cubren las necesidades de todas nuestras industrias; la clasificación por Cnaes ha resultado discriminatoria dejando fuera a industrias gasintensivas que en Europa sí han recibido ayudas antes y de mayores importes. No se puede mantener la competitividad cuando las medidas aplicadas aquí suponen importes muy inferiores a los de la competencia y llegan un año más tarde y prorrateadas al 70%. Hay una clara desigualdad competitiva: nosotros seguimos esperando las ayudas de 2022 cuando nuestros competidores están recibiendo las de 2023, y Europa acaba de ampliar la posibilidad de ayudas a los sobrecostes de 2024. En España, según el BOE, el 70% de la ayuda de 2022 llegará el 31 de diciembre.

 

Nuestras industrias no quieren ser un sector subvencionado, piden los mismos apoyos y medidas que se han implementado en el resto de Europa, exigen jugar con las mismas reglas que la competencia. Necesitamos apoyos similares a los que, desde hace meses, han implementado otros gobiernos europeos. 

 

La industria no puede seguir los tiempos de la política. En la economía real la competitividad se deteriora sin entender de plazos ni condicionamientos administrativos. Seguimos insistiendo en la necesidad del Estatuto del Consumidor Gasintensivo, continuamos reclamando que la clasificación realizada por Cnaes es incorrecta y solicitamos la ampliación de ayudas directas ya publicadas en el Marco Temporal de apoyo a las industrias, como ha hecho Francia, Alemania, Italia o Portugal. 

Vivimos una transición energética diseñada sin tener en cuenta a la industria. Ante cualquier cambio de vector energético es clave que las industrias mantengan la competitividad que posibilite la realización de sus actividades siendo medioambientalmente sostenibles a igual coste que su competencia. 

 

España necesita que su industria pueda seguir produciendo y exportando como motor económico del país, de generación de riqueza, empleo estable, innovación e inversión. Desde GasINDUSTRIAL continuaremos trabajando para lograr medidas eficaces, aportando análisis para las mejores decisiones de compra de los industriales y defendiendo sus intereses. 

 

Felices fiestas y salud y paz para 2024.

 

Verónica Rivière

Presidenta de GasINDUSTRIAL